La realización de este reto nos ha llevado mucho más tiempo que los demás, pero gracias a ello hemos aprendido mucho sobre el gran gasto de agua que conlleva nuestro día a día, nuestras acciones y los objetos que nos rodean.
Durante este proyecto hemos llevado a cabo diferentes actividades que están interrelacionadas entre sí, y que tienen sentido las unas al lado de las otras.
Comenzamos investigando que es el gasto de agua directo y cuál el gasto de agua virtual. ¡Es increíble! No dábamos crédito cuando comenzamos a ver los litros de agua que se gastan o contaminan en hacer diferentes objetos, sobre todo la ropa, unos pantalones vaqueros conllevan la contaminación de alrededor de 3.000 litros de agua. Gracias a ello dimos importancia a aprovechar al máximo nuestras prendas, a reutilizar las de nuestros familiares, a la compra de ropa de segunda mano o darles nuevos usos a las prendas que ya no nos podemos poner. Aunque algo que nos sorprendió mucho, y tiene que ver con el trabajo en la escuela, es el gasto de agua para la producción de un folio, y son… ¡10 litros! Si, 10 litros, dos garrafas de agua de las grandes para hacer un solo folio. Ante esta información, tenemos que ponernos manos a la obra, debemos de informar a las personas de nuestro alrededor y hacerles ver el gran gasto de agua que hacemos día a día de forma directa e indirecta, buscar formas de gastar menos agua y de aprovechar al máximo la que necesitemos.
Primer paso: Conocer cuánta agua de lluvia obtenemos.
Creamos varios pluviómetros reutilizando garrafas de agua, que dejamos en diferentes puntos del patio del colegio. Gracias a ellos, y poniendo en práctica los conocimientos del área de matemáticas (realizando un cálculo), podemos conocer la cantidad de agua precipitada a nuestro alrededor. Con esta información podremos saber si debemos de regar más o menos nuestras plantas y a su vez, estos objetos sirven de depósito para poder reaprovechar esa agua que obtenemos de la lluvia. Llevamos a cabo un registro diario a través de una tabla de la cantidad de agua precipitada, por desgracia en las últimas semanas las precipitaciones han sido escasas, por no decir casi nulas, por lo que este proyecto tiene aún mayor importancia.
Segundo paso: ¡Nuestro propio papel!
Como decía anteriormente, el gasto de agua por cada folio (10 litros/2 garrafas) nos sorprendió mucho, menos mal que en el centro tenemos cajas con papel reciclado, papel en sucio para volver a reutilizar y utilizamos distintas TIC para disminuir el uso del papel a la hora de realizar ejercicios. Aun así, como en todos los centros, los alumnos deben de escribir en papel y teníamos muchos folios usados en anteriores cursos que, aunque estuvieran escritos, podríamos reaprovechar. Pero, ¿cómo podemos disminuir el gasto de agua en la creación de nuevo papel en el centro? Solución: Creando nuestro propio papel, papel reciclado, a partir de esos folios que ya están escritos por todas las partes.
Cortamos ese papel en trocitos, los metimos en un cubo y en el mismo echamos el agua de los pluviómetros, obtenido de la lluvia, esa agua lo cambiamos un par de veces para que suelte la tinta de los folios y el futuro papel reciclado quede lo más blanco posible. Después trituramos la masa con una batidora (un adulto), creando la pulpa del papel. Después con unos bastidores vamos dando forma a esta pulpa, haciendo lienzos que colocamos encima de trozos de tela, obtenidos de camisetas viejas (reutilizando la ropa vieja que no van a dar más uso), lo dejamos secar y obtenemos nuestros propios lienzos. Debemos de destacar que estos no son unos lienzos de papel reciclado cualquiera, en su creación cuando la pulpa esta tierna, hemos añadido semillas de flores, de forma que cuando ese papel no tenga más uso, los alumnos puedan ponerlo bajo tierra y obtener flores, ya que la pulpa del papel es biodegradable. Durante el proceso nos hemos manchado, hemos reído y hemos disfrutado creando nuestro propio papel. Hemos de advertir de que crear lienzos o folios de papel reciclado no es fácil, por eso recomendamos ver diferentes tutoriales en YouTube que indican paso a paso como se hace, probar muchas veces y no frustrarse.
Tercer paso: Etiquetado con el coste en litros de agua.
Esto no se queda aquí, debíamos de dar a conocer a las personas de nuestro alrededor la cantidad de agua que se gasta con la creación y producción de diferentes objetos, para ello buscamos una forma original de hacerlo. Cuando vamos a una tienda vemos en las etiquetas el coste en dinero de una prenda, en esta ocasión nosotros también realizamos etiquetas para la ropa y los diferentes objetos, de los propios alumnos y de sus familiares, pero en vez del coste en euros, vamos a poner el coste en litros de agua que conlleva su creación. Para ello hemos utilizado el papel reciclado con semillas que hemos creado anteriormente. En esas etiquetas los alumnos indican la cantidad de litros de agua que ha costado esa prenda, dan a conocer que esa etiqueta contiene semillas y se puede plantar y, por último, ofrecen la opción de conocer formas de compensar ese gasto de agua en la página web del colegio a través de un código bidi que nos dirige directamente a la web del cole. Hemos creado un sello con un código bidi para la realización de estas etiquetas, que nos redirige automáticamente a la web del centro donde los alumnos han creado una recopilación de diferentes formas de ahorrar, aprovechar o potabilizar agua.
Cuarto paso: Recopilación de diferentes formas de ahorrar, aprovechar y potabilizar agua.
Como decíamos anteriormente, los alumnos han investigado diferentes formas de aprovechar, ahorrar o no malgastar agua y potabilizarla. Nos hemos centrado en que busquen, pero sobre todo que pregunten a sus mayores. Desde el centro damos gran importancia al conocimiento o saber popular, muchas veces la respuesta a las preguntas sobre los problemas que se nos plantean en el presente o en el futuro, están en el pasado. Aprovechemos la sabiduría y el conocimiento de las personas que nos rodean, con más experiencia que nosotros.
Pincha en la imagen y te damos ideas de cómo ahorrar agua!
Quinto paso: Cuantas menos tortugas mejor.
Para concienciar a los alumnos en el centro sobre el gasto de agua o hacer que el mismo disminuya, tratamos de hacerlo de una forma lúdica. Los alumnos mayores, de 5º y 6º de EP, han utilizado sus conocimientos de las TIC, en este caso con Canva, para diseñar unos carteles con los que, de forma lúdica, todos los alumnos pueden calcular cuánta agua han gastado al lavarse las manos o la cara.
Se trata de contar cuantos segundos hemos tenido el grifo abierto, a veces hacerlo de forma correcta es difícil o lo contamos muy rápido o muy despacio. Llegamos a la conclusión de que contar tortugas en alto es un buen método, ya que tardo un segundo en decir una tortuga, dos tortugas = dos segundos, etc. y es más fácil para explicárselo a los alumnos de educación infantil. Investigamos y vemos que cada segundo sale del grifo alrededor de 0,2 litros de agua, por lo que en un 5 segundos o 5 tortugas sale un litro. De esta manera hemos tratado de exponerlo en el cartel, así los alumnos más mayores que conocen las medidas del tiempo (segundos) y las de los líquidos (litros) pueden realizarlo, y a los más pequeños se lo simplificamos asociando una cantidad de tortugas con botellas de agua. El cartel cuenta con una gotita de agua que se puede mover para poder ver de forma visual la cantidad de tortugas o agua que hayas gastado. Muchos alumnos, sobre todo los más pequeños, se encuentran emocionados con intentar gastar la menor cantidad de tortugas posibles. De esta manera a través de la gamificación, o la utilización de estrategias de los juegos en la educación, podemos conseguir que se diviertan gastando menos agua.
Este proyecto ha tenido muchos pasos, pero que todos ellos completan un fin común, dar la importancia que se merece al agua, y tratar de no malgastarla y aprovecharla. A través del mismo hemos aprendido a conocer como contabilizar la cantidad de agua que obtenemos a través de las precipitaciones, el coste de agua virtual que conlleva la creación de los objetos de nuestro alrededor (sobre todo lo relacionado con el textil), a crear nuestro propio papel reutilizado utilizando papel usado y trozos de ropa antigua, a concienciar a los demás sobre el gasto de agua que realizamos a través de una forma original con etiquetas de papel reciclado con semillas, la recopilación de muchas opciones para no malgastar o aprovechar agua y disminuir el agua gastada a través de los grifos del centro escolar.
También hemos compartido la información con @ecovidrio en nuestras redes sociales, en twitter: https://twitter.com/cravalvanera?lang=es